El estado y la violencia contra la mujer

Estamos prontos a recordar el Día de la No Violencia contra la Mujer, por ello nos parece necesario indicar que la violencia también se puede expresar desde el Estado, si este no defiende los derechos fundamentales de las mujeres, como es el derecho a la salud. El Estado tiene como función garantizar que sus ciudadanos puedan ejercer sus derechos, así como también realizar sus deberes. Lamentablemente estas últimas semanas las mujeres estamos viviendo una indefensión al retroceder en políticas de salud ya establecidas y que beneficiaban a todas las mujeres, especialmente a aquellas con menos recursos.

Con la decisión del Tribunal Constitucional de prohibir la entrega gratuita de la anticoncepción de emergencia en servicios de salud, el Estado ha evidenciado el poder que los grupos conservadores de nuestro país tienen sobre ellos, haciendo prevalecer fundamentos no científicos, prácticas y posiciones de la cultura paternalista (por no decir machista) para no permitir a las mujeres el control sobre sus propios cuerpos.

El derecho a decidir, "fundamental" para un país en democracia, ha sido vulnerado justamente por quienes (TC) tienen la obligación de protegerlo, más aún cuando tod@s somos conocedores de la importancia de políticas públicas en salud reproductiva para reducir la muerte materna y la mortalidad infantil; ambos objetivos que pueden ser alcanzados si la población dispone de una amplia oferta de servicios y productos de anticoncepción. Dentro de estos productos se encuentra también la Anticoncepción de Emergencia, un método ANTICONCEPTIVO que funciona ANTES de la unión de espermatozoide y óvulo, y que no tiene efecto alguno sobre el óvulo que ya se encuentra fecundado.

Si permitimos este tipo de violencia desde el Estado por qué habría que sorprendernos que dentro de poco, este mismo grupo de conservadores nos limiten el acceso a otros métodos, no hay que perder de vista lo que indicara el mismo Papa con relación al uso del condón. Si los creyentes de cualquier religión consideran que el uso de la AOE afecta sus principios, perfecto, que no la usen, pero una mujer víctima de abuso sexual tiene el derecho de evitar un embarazo que no desea.

De otro lado, debemos parar la propaganda maquiavélica preparada por estos grupos quienes obviamente y por los medios que utilizan, están gastando grandes sumas de dinero en lugar de invertirlas en su misión. Para muestra están sus presentaciones en los medios, marchas, publicaciones en prensa, en la web y luego dicen que somos nosotros, las ONG, quienes financiadas por los laboratorios salimos a la defensa.

Lo que sí es cierto es que sí estamos en la defensa de los derechos fundamentales de las mujeres, de sus hijos, de sus familias, de sus parejas y con ningún fin oculto o macabro, lo hacemos porque somos ciudadan@s con consciencia democrática, que respetamos las diferencias, que somos conscientes que tod@s, absolutamente tod@s los peruanos/as tenemos derechos, no sólo quienes profesan una religión en particular.

Esperamos que más personas se sumen a esta protesta contra una forma más de violencia contra la mujer y que de una vez por todas realmente los peruanos/as nos unamos en pro de nosotros mismos y de nuestro país.
No a la violencia y el 25 de noviembre salgamos pacíficamente a protestar para hacer consciencia en nuestra sociedad, en nuestros políticos y autoridades sobre la violencia contra la mujer, que vulnera los derechos fundamentales de más del 50% de la población del país... las mujeres.

Mayor información en nuestra línea gratuita 431-5929 ó en nuestro correo consejeria@apprendeacuidarte.com.pe